
Este pequeñajo fue capturado durante la captura para castraciones, que de hecho se pudo esterilizar, a pesar de verse tan pequeñajo. Llegó muy tímido y miedoso, pero en cuanto le tocas un poco empieza a ronronear tímidamente desde su cuevita, ahora está en una acogida para poder acabar de socializarlo y que pueda irse adoptado. La acogida está haciendo grandes progresos con él en poco tiempo, cosa que era de esperar, porque ya tenía pinta de tontorrón 🙂
Si quieres adoptarlo, por favor, escríbenos al correo adoptaproyectogato@gmail.com