Pumuki es uno de los 27 gatos rescatados a principios de 2017 que malvivían en una casa semiderruída en Cabral, Vigo, y en condiciones totalmente insalubres.
Pumuki es un cacho de pan, una buenaza que siempre está pendiente de ti para pedirte un cariño y que se lleva de maravilla con sus compañeros.
Fernando llegó a finales de 2018 con Grumpy (en acogida), Soler y Cristina de un rescate en el callejón de Soler. Nos dieron aviso de que estaban en una casa abandonada y en muy malas condiciones.
Es un gato ya mayor, muy bueniño, paciente y tranquilo al que le encantan los mimos. Sabemos que para él no supondría ningún problema adaptarse al cambio que sería vivir rodeado de una familia que lo quiera, dormir calentito en su camita y demás comodidades de vivir en un hogar 🙂
Cristina llegó a finales de 2018 con Grumpy (en acogida), Soler y Fernando de un rescate en el callejón de Soler. Nos dieron aviso de que estaban en una casa abandonada y en muy malas condiciones.
Es una abuelita muy dulce y tranquila, nunca se mete en jaleos y su lugar favorito siempre será el que más cerca esté de la estufita. Nos encantaría que pudiera llegar a conocer lo que es el calor de un hogar.
Van Gogh fue recogido en 2019 junto a Lena, su compañera de una colonia en Vulcano, Teis. Ambos necesitaban operarse las orejas por carcinoma.
Este precioso es muy tranquilo y bueno, pero tímido y miedoso incluso con sus compañeros felinos. Poco a poco se va soltando y se va acercando curioso cuando los demás están pidiendo cariños.
Van Gogh necesita mucho trabajo y mucha calma, pero sabemos que en una casa sería buenísimo.
A Cuco lo recogimos a finales de 2016 siendo aún un cachorro de unos 6 meses en una colonia del centro. Nos dieron el aviso de que posiblemente había sido envenenado dado que unas semanas antes, un gato adulto falleció, se sospechó, envenenado por una vecina.
Es un gato muy bueno pero también muy tímido. Solo deja un poco atrás la vergüenza cuando llega el momento de la latita, siempre atento para pillar su ración.
Nuestro Cuco ha tenido la mala suerte de tener que crecer en el refugio y ya le va tocando tener su oportunidad de saber lo que es un hogar, no creéis? 🙂
Rola es la madre de Ría y Frodo, recogidos todos ellos en 2018 en un taller donde entraban y nos llamaron porque no los querían allí.
Es una gata muy miedosa pero poco a poco, parece que quiera ir acercándose. No es brava ni agresiva, es de las que se esconden y, una vez en su cuevita, se deja tocar ligeramente. Nosotros intentamos ayudarla a confiar, pero el proceso en el refugio siempre es más lento porque por desgracia, no podemos dedicarle a gatos como ella, todo el tiempo y dedicación que necesitan para perder ese miedo.
Frodo llegó a finales de 2018 junto a su madre Rola y su hermana Ría. Nos dieron aviso de un taller por la zona de Bouzas de que se les metían en la nave y directamente no los querían allí.
Frodo sea posiblemente el menos miedoso de los tres. Es el único que se deja ver sin problema estando los voluntarios allí y, aunque es cierto que no se deja tocar fácil y en ocasiones tiene un punto de fierecilla, creemos que es cuestión de tiempo que mejore esa sociabilidad.
Choco, su madre Petra y sus dos hermanos, Leonor y Dingo, fueron recogidos de unos soportales en Coia donde no tenían cobijo alguno a causa de unas obras, en el año 2016. Estaban todo el día a la intemperie, los vecinos no los querían allí, acercaban a sus perros para asustarlos y se subian a los árboles para escapar.
Choco es una gata que, como en otros muchos casos, cuando llegó se mostraba muy agresiva y ahora ya se deja tocar y le gustan los mimos.
Pasa muchas veces que llegan siendo muy bravos porque están asustados viéndose de un día para otro en un sitio nuevo, un entorno desconocido para ellos, pero con tiempo, paciencia y confianza, bajan el nivel de agresividad. A veces se convierten en gatos amorosos y achuchables, otras solo llegan a permitir que les roces, pero su tolerancia a las personas siempre mejora.
Lorry, de la colonia que vivía en una nave del Puerto que abrieron al público y tuvimos que recoger cuando empezaron con las obras.
Son todos ellos gatos esquivos y huidizos pero también en la mayoría de los casos, son gatos que tienen madera de cambiar, y Lorry sea posiblemente el caso que más claro vemos. Es una gata tranquila y buena pero que no se acaba de fiar de las personas.
Son muchas las veces que gatos que siempre se han mostrado esquivos, al conocer el calor de un hogar cambian y se convierten en gatos cariñosos y mimosos.
Lunar es otro de nuestros gatos procedentes del Puerto, a los que tuvimos que recoger porque la nave en la que vivían fue abierta al público.
Todos ellos son esquivos y Lunar no es la excepción, sin embargo apunta maneras a convertirse en un gato sociable e incluso mimoso en otro entorno, en una casa con todo lo que ello implica (el calor de un hogar, trato más personalizado, cariño…)
Mofly es uno de los supervivientes del Tercio de Afora. 4 gatos muertos más la venta del solar donde vivían, hizo que sus cuidadoras buscaran ayuda. Es un gato muy huidizo, asustadizo, miedoso. Sigue sin dejarse coger pero empieza a perder el miedo, coge las chuches de la mano.Es un gatiño mayor, que tiene algo especial en su mirada.
A Loki la envenenaron en 2013 en la zona de la antigua estación de Renfe, en las obras del AVE. La recogieron moribunda y convulsionando pero por suerte, se salvó.
Loki es una gatiña tremendamente desconfiada y nerviosa, sin embargo, no quita ojo de todo lo que pasa en el refugio, eso sí….a distancia. Poco a poco se va soltando, pero necesita una familia con mucha paciencia.
Furón llegó con su hermano Furito (fallecido) en 2013. Es un gato con mucho miedo que respondía de forma muy nerviosa y agresiva. Ahora se deja tocar algo, vamos avanzando poquito a poco.
Con paciencia y tiempo creemos que se convertirá en un gato sociable.
El Cusponcito es uno de nuestros veteranos. Forma parte de la gran herencia de gatos que nos dejó el lacero municipal, gatos de los que no sabemos nada sobre su origen.
Es, como tantos otros, desconfiado y huidizo, de los que en el refugio no nos deja ver lo cariñoso que puede llegar a ser pero que, posiblemente, en una casa sacaría su lado más mimoso.
Tomás viene de la zona de Bouzas. La persona que nos lo trajo nos decía que la seguía cada vez que iba a darle de comer. Nunca se resguardaba, siempre mojado o debajo de los coches.
Es un grandullón muy cariñoso, amoroso y bueno. Muy tranquilote y deseoso de conocer por fin el calor de un hogar.
A Laurita la recogimos en Villa Laura, en la C/ Hispanidad a mediados de 2016. Intentamos localizar a sus posibles dueños sin éxito. Nadie la reclamó.
Es una gata muy bueniña y muy muy mimosa, de las que cuando entre tantos compañeros de jaulón, es con ella con quien te paras a darle unas caricias, lo agradece enormemente. Nuestra Laurita es un auténtico amor que está deseando que llegue por fin esa familia incapaz de resistirse a su dulzura.
Telma fue recogida en el Barrio do Cura en 2019. A ella y al resto de gatos que vivían allí, hubo que sacarlos cuando metieron las excavadoras.
Es una gata esquiva, huidiza, brava… En muchos casos, con el tiempo suavizan su carácter y llegan incluso a convertirse en gatos mimosos. Esperamos que Telma sea uno de esos casos porque sabemos que desgraciadamente, de no mejorar, sus posibilidades de ser adoptada caen en picado.
Casero es un gato abandonado por sus dueños y que acabó en el refugio. A causa del fuerte estrés provocado al verse fuera de su hogar y en un ambiente tan diferente, con tantos otros gatos, sin poder prestarle la atención personalizadísima que tendría en una casa de acogida, sufrió un bajón de defensas importante en los primeros días, estuvo con suero y por suerte, se recuperó.
Al contrario de lo que suelen hacer otros gatos que vienen de casas, Casero no respondió agresivamente. Es super cariñoso, juguetón, amoroso, que se merece salir del refugio y volver a estar en un hogar donde lo quieran de verdad.
En el refugio no está bien, no le gusta convivir con tantos gatos y a menudo se enfada con ellos si se le acercan demasiado.
Casero necesita un hogar donde no tenga que compartir la atención de las personas con tantos gatos.
Lina es la madre de Lino y Kalajari, rescatados todos ellos de una casa del centro, abandonada y semiderruida de donde no eran capaces de salir. Llevan con nosotros desde enero de 2018.
Lina, al igual que sus hijos, era muy huidiza. Ellos poco a poco se iban soltando, pero a Lina le estaba costando más, tenía mucho miedo a las personas. Aún así, casi tres años después, Lina ya dejaba que acercaras la mano para olerte, se dejaba rozar e incluso te maullaba pidiendo de esa comida rica que sabe que llevas escondida en el bolsillo 🙂
Un buen día se acercó pidiendo mimos y levantando el lomito! Uno de esos días que se te quedan grabados y que te emocionan. Por fin nuestra preciosa dejó sacar ese lado tan dulce que escondía 🙂
Piotrek es uno de los 27 gatos desalojados en 2017 de una casa de Cabral, un dramático caso de Síndrome de Noé en el que vivían en muy malas condiciones.
Este precioso es cariñoso, juguetón y pacífico, de los que no quieren problemas con nadie. Un amor de gatiño que espera, junto a sus compañeros en el refugio, su oportunidad de descubrir lo bonito de tener una familia y disfrutar del calor de un hogar.
Uve, otra de las gatiñas de la colonia de Pizarro. Es una colonia que se está retirando a causa de las obras que les está dejando sin sitio.
Es una gata tranquila, de las que prefieren pasar desapercibidas. No ha tenido nunca problemas con sus compañeros felinos pero probablemente los haya tenido en el pasado con las personas. Nos observa atentamente pero no quiere que nos acerquemos a ella. Los gatos como ella necesitan tiempo. Muchas veces con paciencia y cariño, se consiguen grandes logros.
Nuestra pequeña lleva desaparecida desde abril de 2020. Si alguien la ve, por favor, poneros en contacto con nosotros. La echamos mucho de menos 🙁
Nuestra preciosa Campanita llegó a nosotros la primavera de 2019 siendo aún muy pequeña. No tenía ni 6 meses. Tenía familia, pero cayó de una ventana y aunque pudimos contactar con ellos, no quisieron recuperarla.
Campanita es un auténtico amor de gatiña. Super dulce, sociable y muy mimosa. Sería la gata más feliz del mundo con una familia que la quisiera como ella se merece.
Candela fue recogida a principios de 2018 en Panxón, donde parece que había sido atacada por un perro hacía dos años que la dejó sin un ojito.
En el antiguo refugio parecía estresada con tantos gatos o encerrada, daba vueltas haciendo un recorrido fijo cuando no había gente en el jaulón. No estaba bien y nuestra pequeña fue de una de las que más agradecieron el cambio al nuevo refugio. Desde el primer momento, pasó de estar siempre escondida cuando había humanos cerca, a ser la primera en aparecer cuando llegaba el momento de abrir la puerta al patio.
Candela es una gata miedosa que escapa si intentamos acercarnos a ella, sin embargo creemos que con tiempo y paciencia, fuera del refugio sería cariñosa y melosa.
Lara, nuestra pequeña bautizada así por la historia de su rescate, en marzo de 2019, cuando apenas tenía 5 meses.
A primera hora de la tarde dieron aviso de que había un gato en las columnas centrales del túnel de Bouzas. Por la noche, cuando había menos tránsito, dos voluntarias fueron con chalecos reflectantes, triángulos y mucho cuidado. La gatiña estaba muy asustada, por lo que echó a correr nada más acercarse mínimamente a ella. Consiguieron cogerla finalmente con un ganapán cuando la gata intentó refugiarse en una cabina de SOS. La única persona que paró aquella noche para preguntar si podía ayudar, fue una chica llamada Lara, así que bautizamos a la pequeña 🙂
Fernandina fue recogida en el 2012 en el Monte de los Pozos. Creemos que la pudieron abandonar o que se pudo extraviar.
Tranquila, super cariñosa y bueniña con todo el mundo, pasa completamente desapercibida en el refugio, pero en cuanto alguien le dedica su atención tiene mimos para dar y regalar.
Gus y su hermano Chulito forman parte del grupo de gatos que hemos ido sacando del Puerto, de la zona que se ha abierto al público y que les ha dejado sin cobijo posible.
En el refugio es un gato esquivo, pero creemos que en un hogar, con paciencia y cariño, esa desconfianza iría desapareciendo.
Ambi forma parte del grupo de 27 gatos desalojados de la casa de Síndrome de Noé de Cabral en 2017.
Es una gata a la que vas conquistando con comida. Es muy tranquila y pacífica con el resto, tanto que pasa desapercibida hasta que reparas en sus preciosos ojos 🙂
Dumbo es uno de los gatiños recogidos en 2019 de la colonia del Xeral, que se está intentando retirar por el mal sitio en que se encuentran.
Es un gato joven y muy simpático. Como casi todos sus compañeros de colonia, es bastante huidizo pero tiene un toque de «en realidad, me gusta que me prestes atención» 🙂 No deja que lo toques pero sí te echa la patita despacio para jugar.
Se adaptó rápido al refugio y no tiene problemas con sus compañeros. Es, como se suele decir, un culo inquieto, siempre revoloteando por todas las esquinas.
Dado llegó procedente de la colonia del Puerto, donde a causa de las obras, se habían quedado sin cobijo alguno.
En el refugio es un gato huidizo con las personas, sin embargo, Dado tiene ese «punto» que nos deja entrever que en una casa, con el calor de un hogar, dejaría atrás ese distanciamiento y se volvería mucho más sociable.
Ágata tuvo que ser recogida en el entorno del Xeral en 2019 porque la gente de la zona no la quería allí. Los conflictos entre sus cuidadoras y los vecinos eran continuos y la pobre ni siquiera tenía donde refugiarse del frío y la lluvia.
Es una gata muy miedosa y desconfiada, que escapa en cuanto ve amago de acercarte a ella. Sin embargo, le cuesta resistirse a la comida rica y siempre intenta ponerse a la vista para no quedarse sin nada.
Nata fue recogida junto a Fresa e Iris a principios de 2019, ya que iban a desahuciar a su dueña y repartió sus gatos por diferentes protectoras.
Nata y Fresa llegaron siendo muy desconfiadas y agresivas, en su casa tampoco eran sociables, sin embargo, Nata está progresando y ya deja que te acerques, te pide cosas ricas e incluso deja que la toques.
Mali es una de las integrantes del grupo de 27 gatos que rescatamos de una casa de Síndrome de Noé en Cabral.
Es una gata muy tímida y quizás un poco desconfiada, no es de las que van a pedirte mimos o de las que los agradece si se los das, pero poco a poco, con paciencia y comida rica se va a acercando.